Después del encantador paseo que nos ha dado Susana por Barcelona, hoy es mi turno de recorrer con vosotros uno de los lugares con más fama en lo que respecta al mundo LGTB: Chueca. Aunque van surgiendo en Madrid otras zonas de interés para el colectivo, Chueca sigue siendo un referente a nivel mundial.
Algunos creen que los que vamos a Chueca, o incluso hemos vivido, estamos en una especie de ghetto. Ghetto o no, es un lugar ideal para sentirte completamente libre y dar la mano a tu chico, un beso, vestir con libertad… o incluso salir del portal travestido sin despertar miradas sorprendidas. Dicho esto, os invito a descubrir mis lugares más personales, no sin antes pediros a que, a través de los comentarios, nos digáis los vuestros.
En mi caso, no hay mejor plan para una tarde de sábado que pasear por la calle Fuencarral para vivir el ambiente vertiginoso de un día de compras. No hace falta comprar para disfrutar con el ir y venir de gente y con algún que otro artista callejero. En los últimos meses ha habido una renovación importante de locales, con lo que si hace tiempo no vas por allí, te invito a descubrir, por ejemplo, el mercado artesanal que han colocado en un viejo descampado.
No soy un animal nocturno, por ello es más fácil encontrarme tomando una cocacola en La Tita Rivera (Perez Galdós, 4) o un delicioso postre a media tarde en Oita Café (Hortaleza, 30), un sitio que ha abierto hace relativamente poco y que combina una decoración diversa, siempre con un toque clásico y hasta bohemio, con los mejores croissants que he probado en Madrid.
Si prefieres algo más contundente para cenar, hay un clásico en el ambiente: El Rincón de Pelayo (Pelayo, 19). Un ambiente agradable para comer o cenar un menú de comida casera que, además, está muy bien de precio. Eso, o siempre puedes tapear en el recientemente abierto Mercado de San Antón, en el que puedes comer prácticamente de todo en las barras que rodean los locales de la primera planta. ¡Hay de todo! ¡Y no dejes de tomar un helado en Labonata, ya en la Plaza de Chueca!. El “heladero” es monísimo.
No ser un animal nocturno no significa que no disfrute de una buena copa en Tántalo (Libertad, 14). Es, con mucho, mi lugar preferido de Chueca para tomar algo. Los motivos son claros: buena gente, buen alcohol, buena música y un ambiente familiar en el que todos son bienvenidos. Su lema, visible en las camisetas, lo deja bien claro: “Mrkn, ké te importa!”. Libertad total.
Por último, y aunque es un plan más de verano, he pasado grandes y románticos momentos en la terraza del Hotel Ada Palace (Marqués de Valdeigesias, 1). Su ubicación permite escapar un poco del bullicio de otras terrazas de moda y disfrutar de unas vistas, para mi gusto, mejores. ¿Te imaginas tomar una cerveza mientras ver atardecer viendo la cúpula del Edificio Metrópolis de la Gran Vía? Desde este lugar podrás hacerlo. A mi me encanta…
No me resisto a conocer nuevos lugares. ¿Alguna sugerencia lectores?
¡Me apunto lo de Oita café!. Si quiero tranquilidad, me gusta, opera, el Palacio Real, por su amplitud.
No conocía esa terraza, y puede que vaya en primavera cuando haga mejor tiempo. Aunque tal vez lo adelante ya que tienen estufas… jeje
Estuve en Madrid hace poco, y tengo claro que es una ciudad donde quiero vivir durante un laaaaarga temporada. En Chueca estuve en Delirio. Me encantó el local, la musica y el ambiente. Y sobre todo a destacar al chico y a la chica ligeros de ropa repartiendo piruletas. Me encantó!
Que bien he comido yo en el Rincón de Pelayo.
Como anécdota, cuento de una vez que pasé por el bar Nike a comprar unos bocadillos para comerme camino del aeropuerto, cuando pregunté a la camarera por la especialidad de la casa me recomendó el bocadillo de tortilla. He de decir, que el tópico estaba riquísimo
La terraza del Ada es maravillosa…como tú dices, en verano y por la noche Madrid se vé precioso…
Como lector extranjero que soy, quisiera saber si Chueca, y en concreto esa terraza de la foto colindan con la Gran Vía. Sólo curiosidad 😉