Una de las primeras veces que vine a pasar un puente a Madrid con mi novio, acabamos en este café de Chueca.
Situado en la Calle Hortaleza, 22 (Metro Gran Vía) el café Mamá Inés te invita a disfrutar de un cafecito o infusión acompañados de una porción de tarta.
El local no es muy grande, tiene forma alargada con una escalera en la parte derecha que te conduce a la planta baja donde están los baños.
Todo el local está lleno de mesas en las que poder charlar animadamente con tu pareja o amigos. La música no está alta, lo que permite escuchar y ser escuchado. E igualmente permite escuchar el tintineo de cucharillas, tazas y platos, ruidos éstos propios de una cafetería y que agradezco como fondo.
Las paredes están decoradas con cuadros de artistas jóvenes que se exponen de manera temporal, lo cual siempre es de agradecer. Decir que está permitido fumar en todo el local, lo cual es un punto en contra para los que ya no fumamos.
Os recomiendo visitar Mama Inés por las tardes para tomar un cafecito con tarta, o bien por las mañanas para disfrutar de alguno de cuatro desayunos: el clásico, con cruasán, napolitana, donut o tostada con mantequilla y mermelada; el cordobés, con pan de pueblo tostado y untado con tomate, ajo, aceite y sal; el canario, compuesto por fruta, cereales y yogur; y el francés, con cruasán relleno de jamón y queso cubierto de besamel y queso gratinado. Y en verano pudes tomarte algo tan especial como el granizado de sandía.