Ya ha pasado otro año más, y van siete. Cuesta creer que haya pasado tanto tiempo pero la verdad es que los que trabajamos en este blog lo hacemos con muchas ganas e ilusión. A veces cuesta afrontar ciertas noticias por lo tristes y duras que son, pero estamos convencidos que es necesario contarlas. Además, y pese a todo, siempre intentamos que Ambiente G tenga ese toque alegre y desenfadado que puede alegrarte el día.
Aunque parezca un tópico este blog no existiría sin vosotros y vuestros comentarios que consiguen animarnos para estar siempre al pié del cañón. Por eso, como cada año, los editores hemos decidido contaros algo sobre nosotros.
Por cierto, el pastel que encabeza el post lo ha hecho Manu, el cocinillas del blog, especialmente para la ocasión.
JaviM
Hace un par de fines de semana hice mis primeras lentejas. Desde que me fui a vivir lejos de mi familia me he dedicado a cocinar platos que para mí eran fáciles, pero jamás me había atrevido con ninguno de cuchara. Así que le pedí la receta a mi madre y me puse manos a la obra. Cuando metí la cuchara en el plato y comprobé que eran un epic win, sentí esa felicidad de los pequeños retos conseguidos, de la independencia plena, del ser capaz de cualquier cosa.
Me he esforzado mucho por que 2013 sea un año feliz en mi vida. Y a falta de un par de meses para que acabe, puedo afirmar que lo he conseguido. A pesar de que mi padre ya no esté y lo eche tanto de menos, a pesar de la crisis económica, a pesar de que haya miembros de mi familia y amigos que no lo estén pasando bien. A pesar de absolutamente todo, me he esforzado en saborear mis primeras lentejas y en dejar que me llenen de felicidad. Ahora toca ir a por las segundas y las terceras y las cuartas. Y en esas estamos.
Nacho
Sin saberlo, coincido con mi compañero JaviM. En estos tiempos depresivos en lo que parece que no hay luz al final, con una crisis que a todos nos ha afectado de una manera o de otra, somos muchos los que nos resistimos a caer en ese pozo negro que parece que nos ha invadido a todos. El 2013 ha sido un año diferente, un año agridulce en el que la ilusión se ha impuesto al cansancio y en el que he puesto en marcha un par de proyectos empresariales que poco a poco van saliendo adelante con mucho esfuerzo.
Un año en el que Ambiente G sigue ocupando por suerte un espacio importante en mi vida, y en el que he aprendido a disfrutar de esos pequeños momentos que nos da la vida. Desde un desayuno en un sitio bonito mientras leo la prensa, a pasear tranquilamente por Zaragoza o por Madrid con mi pareja, pasando por las tardes con amigos en torno a una taza de café o viendo atardecer en el Pirineo Aragonés. Cosas que no suelen costar demasiado dinero, pero que dan sentido a nuestras vidas, aunque a veces no seamos conscientes de ello.
Jose
Siendo honestos, no puedo decir que este último año haya sido el mejor que recuerdo. Me va bien en el trabajo, también en el amor, tengo el honor de poder celebrar un nuevo cumpleaños de AmbienteG con vosotros… pero pronto hará un año que perdí a mi padre, y no pasa un día en el que no le eche de menos. Él forma parte de mi momento feliz, de ese que hoy quiero compartir con vosotros. Porque poco antes de morir, le conté que quería pedir matrimonio a mi chico. Le dije cómo lo haría, dónde… y busqué su aprobación. Una sonrisa en la cara y un apretón en la mano fueron suficientes para entender que, como siempre había hecho con mi homosexualidad, también me apoyaba en esto.
De modo que lo he hecho. Este verano pedí matrimonio a mi chico. Fue un momento muy bonito, el mejor del año, sin duda. Y lo fue porque se produjo en París, en las primeras vacaciones que teníamos en mucho tiempo; porque, en forma de vídeo, nos acompañaron todos los amigos y familiares a los que previamente había pedido su colaboración y porque, entre lágrimas, y en un precioso lugar que es «Le mur des je t’aime», dijo que sí. Quizás el año que viene por estas fechas os pueda contar cómo ha sido mi boda. De momento, estamos pensando en los detalles. Pero pasará. Y lo llamaremos matrimonio, claro que sí.
Peibols
La verdad es que en este último año he tenido muchos buenos momentos. Pero una sensación que me ha acompañado todo este tiempo ha venido de la mano de una pareja de amigas mías. De una de mis mejores amigas y su mujer. Las dos están felizmente casadas y son madres de un niño precioso.
El haber sido testigo de un noviazgo, de un matrimonio y del nacimiento del pequeño me hace ver la lucha normalizadora que mis amigas llevan a cabo día a día, de forma incansable. Tonterías como el registro civil, el pediatra o pedir la baja por maternidad hacen que poco a poco todo su entorno vaya viéndolo como algo habitual.
Cada uno luchamos a nuestra forma, con más o menos agresividad, gritando más o menos. Pero esta lucha es necesaria hasta que la palabra «normal» deje de ser un adjetivo en las relaciones y familias homosexuales.
Manu
Este último año ha sido un buen año, a pesar de las malas apariencias por eso de acabar en 13, un año achuchadete por tanto recorte y sobre todo por que los chicos de hacienda están rebuscado de donde sacar euros y revisan las cuentas de la clínica veterinaria que monté hace 4 años con mi socia Esther. Y a fuerza de trabajo y tesón ahí estamos luchando y sacando nuestro negocio adelante. La verdad es que hacerse mayor y abrir un negocio cuesta. Por otro lado, como bloguero gastronómico he tenido la oportunidad de seguir creciendo y lo que empezó como un pasatiempo ha ido ocupando y llenado mi vida de anécdotas, viajes y buenos amigos. Además, en agosto comencé mi andadura en Ambiente G, algo que jamás habría imaginado y en el que he puesto muchas ganas e ilusión. El buen ‘rollo’ que tenemos los que hacemos este blog, no se ve pero existe y me encanta formar parte de este proyecto.
Pero si este año es, o será especial; digo será, porque aún no nos hemos puesto en marcha; es porque hemos decidido que sería buena idea completar la familia y añadir un pequeño bebé humano. Mi familia con Fran ya me gusta, conste, nos acompañan desde hace 5, 4 y 3 años respectivamente, Conxita, Opa y Martina, a los que llamo nuestros bebés peludos pero después de casi 5 años juntos, superada la primera hipoteca y montar una casa juntos, queremos dar un paso más. Supongo, que si todo va bien, a pesar de las muchas trabas que tendremos, no podré evitar ir contándolo. Y si luego no sale bien, no pasa nada, las peluditas siempre estarán ahí.
Susana
Formentera me prometió que este verano que me llevaría a su playa favorita. No me dijo cuando, pero una mañana me sacó pronto de la cama y después de un rato en coche y un emocionante trayecto en barco llegamos al parque natural de Cabrera, la más pequeña de las Islas Baleares. El lugar es paradisíaco, aguas cristalinas en playas casi desérticas, mucha paz y, sobre todo, la mejor compañía.
Cabrera es un lugar increíblemente tranquilo, bueno, eso si las lagartijas autóctonas, sargantanes, no la toman contigo. Las lagartijas de la isla están protegidas, tienen un color azulado muy bonito, pero también están acostumbradas a ser las reinas del lugar y supongo que ocupamos su roca favorita, porque una de ellas le mordió cinco veces, sí, 5, a Formentera –nada grave, sólo pellizquitos intimidadores–.
Son días como este los que marcan la diferencia, te llenan las pilas y consiguen que afrontes todo lo demás que te llega con la energía necesaria.
En Ambiente G | Ambiente G cumple seis años
En Ambiente G | Ambiente G cumple cinco años
En Ambiente G | Ambiente G cumple cuatro años
En Ambiente G | Ambiente G cumple tres años
En Ambiente G | Ambiente G cumple dos años
¡Feliz cumpleaños! y gracias un año más por vuestro esfuerzo y vuestra compañía. Y ¡que ganas de darle un bocado a esa tarta! :D. Un beso para cada uno
¡Zorionak a todos vosotros!
Pues nada, felicidades
¡Feliz aniversario y por muchos más! Gracias por todo lo que comparten con nosotros.
¡Felicidades! quería agradeceros en particular que no seáis sensacionalistas en noticias sobre ataques homofobos u homofobia como sí hacen otros «medios gays» .
¡Seguid así!
Felicidades! Gracias por acompañarnos en este trayecto casi todos los días del año, es un placer leeros y saber que no estamos solos… ¡Que sean otros 7 más, como mínimo!
¡Moltes Felicitats! y por muchos años más
Muchas felicidades desde Nicaragua. Hacen todos un excelente trabajo!!!!