El Ministerio del Tiempo esta semana se nos ha puesto mágico. Y es que la patrulla, no conforme ya con los viajes en el tiempo, se mete esta semana en el tema de la magia y los poderes abriendo una puerta, nunca mejor dicho, a cierto tipo de personajes que pueden dar algo de marcha a la trama. No los llegan a llamar mutantes, pero vamos, que por ahí van los tiros. Repasamos, con spoilers, el capítulo de ayer de «El Ministerio del Tiempo».
El Ministerio del Tiempo e14: Tiempo de Magia
Pues todo comienza con la obsesión de Amelia con Julián, lo cual le lleva a jugar con una planchette (una ouija, como la conoce Pacino y como la cocnocemos nosotros) y esta forma de comunicación le da un nombre: Houdini. Casualidad que al poco les pongan la misión de investigar a un miembro del Ministerio de 1924 que tiene visión de rayos-X y que además, va a conocer al propio Houdini.
La patrulla viaja a las Indias (según Alonso) para encontrarse con uno de los mejores escapistas de todos los tiempos, que al más puro estilo de Ciudadano Kane, sólo tiene una obsesión en esta vida. Es esta obsesión de volver a contactar con su mujer y con su madre lo que finalmente ayudará a Amelia a resolver con éxito la misión. Con final tan mágico como emotivo.
Amelia Folch, además de dejar claro sus bases feministas y su girl power! nos ha dejado otra de esas metabromas tan chachis que dan de sí los capítulos de «El Ministerio del Tiempo». Ha sido bastante LOL, las cosas como son.
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— Mº del Tiempo (@MdT_TVE) 21 de marzo de 2016
Mientras, en 2016, ha sucedido lo que todos deseábamos con mucha fuerza: que se acabe con la dictadura impuesta por Susana. La mala más mala se ha quedado sin su amante lesbiana. Irene Larra demuestra, una vez más, que no es tan mala, ni sus acciones tienen una única lectura. Y es que los principios #Cayetaner también son buenos. Así como entre Ernesto y ella consiguen derrocar a la Torres, que jugaba a dos bandas, y devuelven el despacho a Salvador.
Aunque, para envidia de todas las #cayetaners del planeta, el único que puede disfrutar de Irene en todo su esplendor ha sido Argamasilla con sus poderes.
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Para la semana que viene, lo que muchos esperábais pero yo no: el retorno de Julián. Le he cogido tantísimo cariño a Pacino, que hace tan buena pareja con Alonso, que la desaparición de Julián me parecía más que necesaria. Pero mi gozo en un pozo, la semana que viene, vuelve. Pues nada.
En Ambiente G | El Ministerio del Tiempo e13: Un virus de otro tiempo
Yo también prefiero a Pacino que a Julián quien, seamos sinceros, es un poco mustio. Pero como la temporada entera ya está grabada no se puede hacer cambios de última hora y sólo podemos esperar a que en la siguiente vuelva o que, con un poco de suerte, se hayan dado cuenta mientras rodaban de lo bien que funciona y no lo quiten.
Tengo que reconocerlo, al principio lo de Pacino me dio una pereza tremeeeeeenda, pero sí, el personaje también me ha ganado