Nunca entenderé a la gente que le gusta meterse en la vida de los demás y que trata de aumentar las diferencias de los que ya de por sí se pueden sentir diferentes. A esa gente cuya máxima en la vida es prohibir, y tratar de imponer su vida al resto de los mortales.
Para mí, que soy un defensor de la libertad personal de cada uno, no me entra en la cabeza que exista gente que siga estando en contra del matrimonio gay, o de la adopción. O simplemente, que esté en contra de la homosexualidad o de que existamos. Sin más razones que las del odio y el desconocimiento.
Antes, cuando era más visceral, estas posturas me cabreaban y encendían. Pero con el tiempo, uno se tranquiliza y aburguesa, y hoy en día, simplemente, me chocan, por la cortura de miras de este tipo de gente, y sobre todo, por la vida tan aburrida que deben de llevar cuando una de sus máximas preocupaciones es con quien me acuesto, o como se llama la forma legal que permite que pueda compartir mi vida con otro hombre al que quiero.
Máxime, con lo bella que es la vida para disfrutarla, si te pones en plan positivo, o la de cosas que hay que hacer en este mundo para ayudar a los demás si te pones en plan negativo. Cualquier cosa, antes que fastidar al prójimo.
Pero hoy en día, además de chocarme, este tipo de gente me causa pena. Pena por la cantidad de cosas que se están perdiendo en su cerrazón. Pena por la de gente que están dejando de lado, sin permitirse siquiera reír o compartir penas y alegrías y sin darse cuenta de todo lo que pueden aportarle. Pena, por los hijos gays que puedan llegar a tener, y que tendrán que sufrir una madre o un padre homófobo.
Y también me llevan a una reflexión. ¿Qué es lo que les hemos hecho, para que sientan ese odio visceral hacia los gays? Un odio que provoca a veces simplemente una mirada de desprecio, o un chiste homófobo, o una paliza al salir de un bar de ambiente, o un comentario de mal gusto en una tertulia radiofónica. Sinceramente, no lo se. Dicen que la incomprensión nace del miedo a lo desconocido.
Aunque estoy convencido de que en muchos de estos casos, la incomprensión cara a la galería nace del miedo a ese desconocido armarizado que muchos supuestos heteros machitos llevan dentro, reprimido y sin dejarle asomar ni la más mínima lentejuela por miedo al que dirán y tener que dejar de ser el gallito del corral. Miedo, en definitiva, a ser como una delicada hoja en mitad de un pedregal.
Yo ya ha llegado un momento en que me he cansado. Directamente cuando veo que alguien no razona ya ni me esfuerzo en hacerle entender nada, simplemente esa persona me da un poco de pena y ya.
Lo curioso es que las últimas semana conocí a un chico gay que era así. Sí, puede sonar un poco extraño pero básicamente es de mente muuuuy cerrada. A todo aquel que ya no era como él lo repudiaba y se reía de él.
Con lo que nos quejamos mucho de que hay mucha gente que no nos acepta y yo cada vez me quedo más parado viendo que hay un buen puñado de gays que hacen lo mismo con otras personas (léase árabes, sudamericanos o simplemente gente con opiniones diferentes).
Lo fácil que es respetar a todo el mundo y no dedicarse a juzgar a las otras personas…. a mi es que ya más que enfadarme me pone triste todo este tema.
Bueno, todos sabemos que mucha de esa gente critica porque es muy facil criticar cuando todos hablan de lo mismo y no se paran a pensar en si tienen razón o no porque se fian del criterio de sus semejantes y de la cultura en la que han crecido
Estoy totalmente de acuerdo contigo. Hay mucha gente aburrida, ignorante y que da pena todo lo que se pierden .
1# Todo es posible en este mundo… Un chico gay con mente cerrada.
En cuanto al tema es muy cierto… Aun recuerdo el intenso lio que hubo en el blog genciencia cuando se dijo que los gays eramos enfermos. Habia mas de 200 casi defendiendo el tema.
Si hay gente asi, se conversa y si no atiende a razones. Pues que no mire, punto, que no tenemos que aguantar a la gentuza como debemos vivir o hacer nuestras cosas.
Pues sí, esa gente pierde demasiado el tiempo en estar amargados, que en el fondo eso es lo que son, unos amargados, con la de cosas por las que hay que preocuparse… a mí también me da pena por los hijos la verdad… es lo único.
pffff es que estoy tan cansada de este tema que ya he aprendido a vivir mi vida y el resto que viva la suya.
Ya tengo suficiente con soportar de vez en cuando los comentarios homófobos de mi querido padre cada vez que se habla de la homosexualidad en la televisión, y sobretodo(y temía el día que emitian ese programa) cuando en «arena mix», programa de antena3; salia alguna que otra playa para público homosexual… directamente me alejaba de la televisión porque es tanto el dolor que siento cada vez que oigo un reproche contra los homosexuales, que como decia, al final he tenido que aprender a ir a lo mío.
lo dicho. cada uno que viva su vida, y si al resto no les gusta como la vives, pues que les den.
Jo, Naco, creo que has utilizado las palabras perfectas para describir lo que muchas veces nos pasa por la cabeza a muchas personas (no solo a los gays).
Personalmente, me da la sensación de que se acercan días turbios con respecto a este tema y me encantaría que todo aquel que no respete a los gays leyera este artículo…. Lo voy a guardar entre mis favoritos, de verdad;)
Por cierto, si antes me gustaba entrar en AmbienteG, ahora me molesta no tener el tiempo suficiente para leer todos los posts y todos los comentarios que cada vez son más y mejores!! Por ejemplo, en este post, los 6 comentarios anteriores me aportan un montón. Os merecíais este éxito, AmbienteG!! 😉
u-u me siento muy identificada con el coment 6.
Recuerdo un día que iva en el coche charlando con mi madre y un prima, salio el tema de porke existen esas personas (mi prima es algo inosente y MUY religiosa) y mi madre a sabiendas de lo ke siento por las chicas dice, pues son cosas que ocurren, ya habia pasado antes, cuando Dios incendió Sodoma y Gomorra, algún dia del mismo modo hará con esas personas, lo hizo por la cantidad de pervercion que existia y yo de: O-o
Y luego me hecha una regañada que no te cuento cuando traté de decirle mis sentimientos a una chica. Ya sé que fue estupido! soy muy joven, pero no es para tanto. Mi madre no sabe nada. ¬-¬ Dice que me quiere a pesar de todo pero yo tengo mis dudas…