Con la elección de Barack Obama como Presidente de los Estados Unidos hace ahora poco menos de un año, los ciudadanos norteamericanos, aquellos de nueva generación, gran parte de los inmigrantes y los inspirados por el hartazgo de una política de cowboy cazurro, protagonizaron una genuina nueva revolución americana poniendo como comandante en jefe de sus sueños, a un nombre, una cara y unos compromisos nuevos y, parcialmente, revolucionarios, dentro de los márgenes posibles en los que puede moverse el jefe de estado de la nación más poderosa de la Tierra.
Los que vivimos dentro de Estados Unidos, no pudimos evitar emocionarnos con la inmensa alegría con que en las zonas menos conservadoras del enorme país fue recibida la noticia en aquella jornada electoral. Aquella noche fue de brindis, risas, abrazos y lágrimas de felicidad en la cara. Fue maravilloso vivir ese momento fundamental de la Historia en vivo.
Entre los que hicimos posible aquella victoria estamos los miembros de la Comunidad Gay, que exaltados por sus promesas favorables a nuestra minoría, acudimos en masa a darle nuestro apoyo efectivo en las urnas. Un año más tarde, sin embargo, en lo que a nosotros se refiere, nada ha cambiado en realidad. El Presidente, sin embargo ha hecho ayer sábado una promesa en la 13 Cena Anual del Human Rights Campaign, la mayor organización en defensa de los derechos de los homosexuales en Estados Unidos.
En la víspera de una marcha multitudinaria por la Igualdad que recorrerá, hoy domingo, las calles de la capital norteamericana hasta el Capitolio, Obama se reunió con destacados activistas de la Comunidad LGBT USA, y nuevamente con su brillantísima capacidad de oratoria el carismático nuevo Nobel de la Paz, nos ha dicho que no sólo no se ha olvidado de nosotros sino que la ley ‘Don’t Ask, Don’t Tell’ será derogada, y que se avanza para derogar la llamada Ley de Defensa del Matrimonio, que discrimina federalmente a las parejas homosexuales legalmente unidas, tanto como matrimonio como en parejas de hecho.
Entiendo y entendemos que el país tiene prioridades más urgentes, como terminar de consolidar la salida de una crisis terrible que le llevó a la Casa Blanca y de la que finalmente el país ya se está recuperando, y sacar adelante un plan fundamental que posibilite que todo ciudadano y residente norteamericano se asegure una cobertura médica decente a costes razonables. Reconozco que poner en marcha un plan de energías verdes que haga que el país lidere el uso de energías alternativas y que repavimente carreteras que no han sido tratadas convenientemente desde los años cincuenta, son prioridades absolutas todas ellas, porque afectan a todos y cada uno de los ciudadanos a los que representa y administra, pero que no sirva de ningún modo eso como excusa para que se retrase hasta ver como se amansan las aguas de tanto cambio y recambio, otra reforma absolutamente esencial. La de la nula discriminación gubernamental a la minoría de la que formamos parte porque nos tocó ser maricas en un Mundo que aún no estaba preparado para ello.
Barack Obama tiene un compromiso enorme con esta generación. Antes, una luz tan brillante nunca fue guía para tantos. A lo peor, tras él, nadie tendrá el valor o el necesario carisma para que, rompa los moldes que rompa, siga siendo defendido por los votantes en las urnas. El verdadero compromiso de este hombre es no fallar a estas emocionantes expectativas y demostrar que no sólo fue el motivo ideal para posters y graffitis más recurrido desde el Che Guevara, sino en efecto, el cojonudo hacedor que hizo de nuestra discriminación, en esta parte del Globo, un repugnante retrato del pasado.
Vía | El Pais
Considero que ha muchisimas personas que se merecía antes el premio nobel de la paz que este hombre.
Esperemos que sea verdad y actue. No obstante, haaga lo que haga, nunca me caerá en gracia obama….
Este hombre está lleno de promesas, es casi lo único que ha hecho desde que ha empiezado su mandato (aunque todavía es muy corto y no ha tenido tiempo de hacer mucho más) pero las promesas de ahora también son grandes «abredoras» de caminos para futuras generaciones, dando ideas para quien las quiera recoger y usar. Yo me alegro que le hayan dado el premio a alguien que está lleno de buenas intenciones y así que pueda animarle (el premio) a seguir por ese camino.
Como alguien dijo, aunque él no haga nada, al menos da ideas para que otros lo hagan. X
Poco a poco se va viendo como y por qué ganó éste hombre la presidencia de los EEUU. Puede ser más importante hacer cosas que estaban abandonadas hace años y que son importantes para todos, pero nuestros derechos también son importantes, y además, no hay un ministro para cada cosa, pues cada uno que se dedique a sus menesteres y así se pueden llevar varias necesidades a la vez. Por otra parte tampoco le veo beneficiario del premio nobel de la paz, hay gente que seguro lo merece mucho más por sus actos y no por sus promesas
Yo también pienso lo mismo, tal vez llegue a merecerse el Nobel en el futuro, pero ahora mismo creo q no. Me encanta este hombre por lo que representa y porque tiene grandes planes de mejora en muchos aspectos, pero una cosa es la teoría y otra la práctica. Sólo al final de su mandato podremos comprobar con objetividad cuanto bien ha hecho y si se merece tal honor.