Dos jóvenes de 17 y 21 años fueron expulsados de una parroquia de confesión ortodoxa en Chile durante la celebración de un servicio religioso en medio de los gritos del párroco.
El sacerdote, no contento con esto, justificó la expulsión de los dos jóvenes afirmando que tenían conductas demoníacas.
El párroco se enteró de la homosexualidad de los jóvenes cuando hace cuatro meses el muchacho de 17 años le «confesó» su orientación sexual. Entonces, el párroco intentó someter al joven a tratamientos psiquiátricos para tratar de cambiar su sexualidad. Para más inri, el adolescente trabajaba en la iglesia de la que fue expulsado.
Un colectivo en defensa de los gays, el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual de Chile (Movilh) mostró su rechazo ante los responsables de la Asociación Parroquial de la Iglesia Ortodoxa. El colectivo gay señaló que «humillar en público a una pareja homosexual constituye una conducta violenta y promotora del odio, que es desde todo punto de vista incoherente con los valores y principios que vuestra Iglesia dice promover».
Vía I Magazine Actitud gay
Y sobre todo un maleducado.