Ayer, leyendo el principal periódico de la Comunidad de Aragón, la verdad es que me sentí orgulloso de mi país.
Después de varios días en los que la negativa a que los gays donen en varios países «desarrollados» ha sido noticia, el hecho de que en España tengamos un sistema sanitario como el que tenemos, pues que quereis que os diga, me llena de orgullo.
El periódico aragonés comienza su artículo, a dos páginas con este párrafo:
«En España hay más de dos millones de donantes de sangre, y nadie les ha preguntado si son homosexuales. El sistema español de transfusión es uno de los más seguros del mundo. No lo superan ni Francia ni Estados Unidos, que siguen impidiendo a los gays donar sangre».
Y la verdad es que con una cortinilla como esa, y tal y como dice REM, un lector nuestro, el artículo es una defensa de nuestros derechos.
Como bien se informa en el artículo, en España no se veta a nadie en razón de su condición sexual.
Lo único que se veta son los comportamientos de riesgo. Cada donante recibe antes de donar información al respecto y un formulario de autoexclusión.
Además, cada bolsa de sangre donada se analiza, para evitar que se cuele sangre infectada por cualquier motivo.
El resultado es claro: España tiene uno de los sistemas de donación más seguros y fiables de todo el planeta.
Y además, esto se ha conseguido siguiendo la directiva de la Unión Europea sobre donaciones, que prohíbe donar sangre a las personas con conductas sexuales que puedan suponer un riesgo a la hora de contraer enfermedades infecciosas graves a través de la sangre.
Aunque en ningún caso se hace referencia ni al sexo ni a la orientación sexual del donante.
El artículo incluye una entrevista a Martín Ceñido, presidente de la Federación Española de Donantes de Sangre.
Ceñido aporta un dato importante. En 20 millones de transfusiones de sangre realizadas durante 10 años, no se ha dado ni un solo caso de contagio de VIH.
Además, Ceñido dice que conoce varios casos de gays y lesbianas que son donantes, y asegura que si tuvieran conductas de riesgo, está seguro de que no donarían, por el alto grado de responsabilidad que tienen estas personas.
El presidente de la Federación de Donantes recuerda que el asunto de si los gays podían o no podían donar se planteó hace ya 15 años.
Un momento en el que los derechos del colectivo LGBT no estaban en su mejor momento. Y ya entonces, desde la Federación se concluyó que debía ser indiferente la orientación sexual del donante, siempre que no tuvieran prácticas de riesgo.
Y no sólo eso. Ceñido afirma que desde principios de los años 90, desde España se recomienda a otrs países que tienen limitaciones para los donantes gays, como es el caso de Francia, que flexibilizaran su autoexclusión.
Pero además, el donar sangre también sirve para controlar la calidad de la sangre de los donantes. Al menos en Aragón, cada vez que alguien dona sangre, recibe una carta a los pocos días, en la que se agradece la donación, y se informa sobre si la sangre estaba en condiciones de ser usada, o si se ha encontrado algún tipo de anomalía.
Vía I Heraldo de Aragón
He ido un par de veces a Madrid y las dos había unos autobuses en la Puerta del Sol para donar sangre. Me parece genial pero que lo hagan más porque donde yo vivo nunca veo sitios para hacerlo y eso de que te informen sobre si tu sangre está bien o mal es un detalle XD (además tengo entendido que en algunos sitios te dan un bocata si donas sangre jaja)
Me pasó justo lo mismo!! Empecé a leerlo y acabé con una sonrisa de oreja a oreja: es un placer leer que los gays españoles no tenemos ningún veto para donar sangre, al contrario que los franceses, y a la vez, España es uno de los países más seguros del mundo, superando a aquellos que si que que prohíben las donaciones de homosexuales. ¡¡Y me encanta que el periódico de mi comunidad presuma de ello con un artículo a doble página!!
Con noticias como esta, uno que no es nada patriótico, se siente orgulloso de ser español!
Gracias Nacho por incluirme en el post 😉