Independientemente del anacronismo que constituye la existencia de una monarquía en un país, es de resaltar que esas personas que todavía ostentan las coronas de ciertos países por la gracia de Dios aprovechen su importante posición para mandar mensajes conciliadores, de apoyo y tolerancia hacia colectivos más desfavorecidos y/o que sufren. Es el caso del rey Harald V de Noruega, que se ha pronunciado a favor de la acogida de refugiados y la diversidad sexual, llamando a sus ciudadanos a hacer un esfuerzo en aras de la unidad y la inclusión en la sociedad escandinava. Ojalá tomasen nota en otros países.
Los noruegos son chicas que aman a otras chicas, chicos que aman a otros chicos y chicos y chicas que se aman los unos a los otros. Los noruegos son inmigrantes de Afganistan, Pakistan, Polonia, Suecia, Somalia y Siria. No es siempre fácil decir de dónde venimos, qué nacionalidad tenemos. El hogar es donde está el corazón, y eso no entiende de fronteras. En otras palabras, tú eres Noruega. Somos Noruega. Mi mayor esperanza para Noruega es que seamos capaces de cuidar los unos de los otros y que construyamos un país con la base de la solidaridad, confianza y generosidad.
Via | GayStarNews
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