Los experimentos cámara en mano siguen dando documentos gráficos que bien merecen ser vistos.
En este caso, en Culture Beats, han salido a la calle y han preguntado a personas de diferentes nacionalidad qué pensarían si su hijo fuese gay.
Hay que decir que la mayoría son respuestas positivas, pero las negativas… lo son tanto, que nos dejan con mal sabor de boca.
Por un lado tenemos a una señorita de Emiratos Árabes diciendo que mataría sin dudar a su hijo, y a otra de Azerbaiyán que dice que iría la médico a preguntarle por qué su hijo es gay.
Un chico de Irán dice que se llevaría un disgusto pero que supone que, al final, lo aceptaría…
muy tristes las respuestas negativas
Bueno, ante todo ese respeto a esas madres con Esas respuestas a sus hijos, pero a mi punto de ver, esas Madres que dicen que matarían a sus hijos o que los llevarían al medico, yo digo que no son madres de verdad, que solo son madres por alguna razón social de obligación o por el miedo a verse solas, por que una madre o un padre de verdad, acepta y intenta entender a su hijo. Pues cuando unos padres desean tener un hijo lo hacen por amor y no para traer al mundo a un ser que sean Como ellos kieren. Tener un hijo es amarlo sea como sea
Bueno, qué fácil es juzgar a una madre, vaya tela.
Lo que más curioso me ha parecido no son las respuestas negativas, sino las positivas que se han apoyado en que en su país es ok to be gay. O sea que si no fuese ok, ¿no les parecería bien? Todo el mundo quiere un hijo sano, feliz, integrado en la sociedad y que continúe haciendo lo que estamos haciendo nosotros y los demás llevan haciendo toda la vida. Salirse de la norma es doloroso para los padres porque creen que sus hijos serán perseguidos, rechazados socialmente, raros. No conocen la homo sexualidad, piensan que toda persona gay cumple con los estereotipos que ellos crean que se corresponden con esa definición. «No son madres de verdad», qué sencillo es el mundo en blanco y negro.
Una madre de verdad puede que sufra al conocer la noticia, porque tiene que enfrentarse a los prejuicios negativos que la sociedad a transmitido sobre los gays. Pero si es una madre de verdad, encontrará la manera de superarlos. Sino, si los prejuicios pesan más que las ganas de comprender a su hijo, entonces está renunciando a su condición de madre. Estoy de acuerdo con los dos, porque comprendo el sufrimiento de las madres con prejuicios, pero me inclino más hacia la opinión de Luis Ángel