La candidatura de Marina Silva para alcanzar la presidencia de Brasil estaba subiendo como la espuma en las últimas semanas. Y todo parecía indicar que si la candidata ecologista se convertía en la próxima presidenta de Brasil, el matrimonio entre personas del mismo sexo sería una realidad en el gigante de América del Sur.
Pero nada mas lejos de la realidad. Pese a que el proyecto para que pudieran casarse dos hombres o dos mujeres aparecía en el programa electoral presentado el pasado viernes, Marina Silva ha decidido retirar por sorpresa el matrimonio de las promesas con las que se presentara a las elecciones.
La propia candidata ha explicado que el párrafo que defend a la legalización del matrimonio fue un error, por lo que tuvo que ser suprimido, recordando que ella respalda la unión civil de los homosexuales, aunque el matrimonio debe quedar limitado a la unión de un hombre con una mujer.
Marina Silva es, pese a sus ideas progresistas, una mujer de fuertes convicciones evangélicas. Una confesión que tiene cada vez mas poder en Brasil y que a buen seguro ha influido en el cambio de opinión de la que podría ser la próxima sustituta de Dilma Rousseff.
De momento, la decisión de Marina Silva de retirar el matrimonio de su programa electoral ha provocado la dimisión de Luciano Freitas, hasta ahora coordinador de asuntos homosexuales de la campana de Silva por el Partido Socialista Brasileño. Una baja que sigue a la del secretario de los socialistas brasileños, Carlos Siqueira, que abandon hace unos días la campana por discrepar con su candidata.
Vía | El Mundo
Fotografía | Facebook de Marina Silva
Acá en Argentina nadie pone en tela de juicio los derechos de los homosexuales. Me parece mal por Brasil.