Tras las críticas recibidas por Barack Obama, por su inmovilismo frente a los derechos de los gays, parece ser que el presidente norteamericano ha decidido hacer un pequeño gesto de cara al colectivo LGBT.
Barack Obama tiene previsto extender los derechos que ya tienen las parejas heterosexuales de los empleados federales a las parejas gays.
Gracias a esta iniciativa, las parejas de los empleados gays tendrán garantizada la asistencia sanitaria, entre otros beneficios.
Sin duda, este es un gesto del presidente norteamericano ante los colectivos LGBT estadounidenses, muy críticos con el escaso apoyo que les está prestando Obama desde su elección.
Pero al final, medidas como estas se quedan en un mero parche. Cierto es que es un paso adelante, y todos los pasos adelantes son bien recibidos.
Pero no es menos cierto que Obama podía haber mostrado su apoyo tras el resultado de California, y que tampoco hizo nada en los casos en que miembros gays de las Fuerzas Armadas tuvieron que enfrentarse a cortes marciales por saltarse la política de la era Clinton que permitía a los gays ingresar en el ejército siempre que escondieran su orientación sexual.
Al igual que podía ser valiente, como lo es con otros temas, y plantear el matrimonio gay como un derecho para todos los Estados Unidos, en lugar de escudarse en que el matrimonio gay es un asunto que debe decidir cada Estado.
Como bien decía Dan no hace muchas semanas, «¿qué le parecería que cada estado legislara por su cuenta una ley para hacer baños separados para negros?».
Veremos como va evolucionando Obama y sus políticas hacia el colectivo LGBT conforme avanza la Legislatura.
Vía I Cadena Ser
¿A que se refiere con empleados federales? ¿son como los funcionarios de aqui?
La medida esta bien pero si abarca a todos.
Algo es algo, pero creo que tiene mas cosas que hacer para que los gays de ahi esten un poco mas contentos.
Cada vez estoy más convencido de que si no instaura el matrimonio homosexual en todos los EEUU, es porque existe una fuerza mayor que se lo impide. Por ese motivo, intenta dar la máxima estabilidad posible a las uniones gays, como es el caso.
Por otro lado, creo en el lado positivo de que no oblige a todos los estados a legalizar el matrimonio homosexual. Hay que comprender la cultura norteamericana. Es cierto lo que vemos en algunas películas y cientos de personas migran cada año, por ejemplo, de costa a costa para «cambiar de ambiente», o «iniciar una nueva vida». Abandonando la titánica Nueva York por un lugar más humilde donde poder «ser alguien».
Imaginemos que somos un emigrante extranjero homosexual que viajamos a EEUU buscando un poco de tolerancia respecto a mi condición sexual (si es que realmente condicionara en algo). Si el matrimonio gay estuviera instaurado como ley gubernamental en todos los estados, podría cometer el error de pensar que en todos los lugares se me tolera igual, lo que es totalmente falso. Y podría, tambien, cometer la fatídica equivocación de pretender vivir en Texas, cuando estaría mucho mejor en Vermont, por ejemplo. Pues a pesar de que EEUU sea un sólo país, es tan gigantesco que las culturas de los estados del sur son, por norma general, radicalmente distintas a las del norte; siendo esta última opción la más adecuada para nosotros.
Concluyendo, a pesar de que en un principio determiné que Obama nos había hecho la de Pilatos; recapacitando mejor me percaté de que está haciendo lo correcto. ¿Qué pensáis vosotros?