Tenemos nuevo homófobo en la plana mayor de la Iglesia Católica en España. Se llama Fernando Sebastián y es la persona que el papa Francisco ha designado para ser el nuevo cardenal español. Su llegada al puesto ha venido acompañada, como no podía ser de otro modo viniendo de dónde viene, de una homofobia atroz.
Dice el buen señor que la homosexualidad es una deficiencia y que debe ser corregida con tratamiento. Lo explica así: «Una cosa es manifestar acogida y afecto a una persona homosexual y otra, justificar moralmente el ejercicio de la homosexualidad. A una persona le puedo decir que tiene una deficiencia que es lo que es, pero eso no justifica que deje de estimarla y ayudarla. Creo que esa es la postura del Papa, lo mismo respecto del matrimonio homosexual o los divorcios. Vamos a estar a su lado, pero la Iglesia no puede cambiar las exigencias de la moral».
Y sigue, intentando explicarlo un poco más y no ofendernos: «Con todos los respetos digo que la homosexualidad es una manera deficiente de manifestar la sexualidad, porque ésta tiene una estructura y un fin, que es el de la procreación. En nuestro cuerpo tenemos muchas deficiencias. Yo tengo hipertensión, ¿me voy a enfadar porque me lo digan? Es una deficiencia que tengo que corregir como pueda». Todo esto dicho «con todos sus respetos». Bravo por el respeto católico.
Vía | El País
Entonces todos esos matrimonios estériles que fornican sin el fin de la procreación están en santísimo pecado??? Puro vicio ??? Los estériles no pueden casarse ni fornicar??? Dios mío , que vició tienen los estériles , que fornican sin procrear !!!! ( ironía por sí acaso )…
Anda, que un cura nos hable de tener hijos….
Si tomamos la denomicación de este hombre de la homosexualidad, en España se entiende por deficiencia, dentro de la experiencia de la salud, una deficiencia es «toda pérdida o anormalidad de una estructura o función psicológica, fisiológica o anatómica».
Junto con el concepto de discapacidad «toda restricción o ausencia (debida a una deficiencia) de la capacidad de realizar una actividad en la forma y dentro del margen que se considera normal para un ser humano» y al de minusvalía «una situación desventajosa para un individuo determinado, consecuencia de una deficiencia o de una discapacidad, que limita o impide el desempeño de un rol que es normal en su caso (en función de la edad, el sexo y factores sociales y culturales)». Podemos sacar en conclusión una cosa:
En este país, existe una ley denominada LISMI (Ley de Integración Social del Minusválido) en la cual se establecen cuatro medidas importantísimas:
normalización (procurar normalizar la vida de la persona disminuida o minusválida para que sea autónomo/a)
socialización (normalización al nivel de sociedad)
integracion (llevar a cabo todos los planes necesarios para que la socialización no provoque diferencias)
sectorizacion (realizar los 3 principios anteriores por sectores: económico, laboral, sanitario…)
EN DEFINITIVA si este hombre cataloga la homosexualidad como deficiencia, por ley, se debe de «justificar moralmente el ejercicio de la homosexualidad» y se debe ayudar a que las personas homosexuales tengamos las mismas oportunidades que los demás.
Otra cosa es que se equivocara con la denominación y quisiera decir desviados, enfermos mentales o algo así como no merecedores de la existencia.
Me repugna, pero antes, que cuide lo que dice, porque se puede tomar por deficiente a cualquiera y ello no le exime de protegerle y ayudarle a que se integre.
Habría que dejar de prestar atención a lo que diga la iglesia. Ya nadie les hace caso y lo único que conseguimos dándoles voz es que su mensaje tóxico llegue a más gente.
Por fin alguien inteligente.
Déjame decirte que estás muy equivocado, aún existe mucha gente católica practicante, entre ellas, yo, y su mensaje lejos de ser tóxico como tú le llamas, es de esperanza, es de amor, de fraternidad, y si no lo entiendes, te sugiero que visites una iglesia cercana a tu casa, y te darás cuenta, que te recibirán con los brazos abiertos, y hasta quizás, si tu lo permites, el sacerdote que te atienda te pueda aclarar algunas cosas.
como se nota que de amor sabe poco….que triste
Ya podría tener mas cuidado el Papa a la hora de elegir representantes, porque con declaraciones como éstas desaparecen todas las buenas intenciones que el haya podido tener.
No debería preocuparse tanto, con esa cara dudo que él tenga mucha oportunidad de participar de dicha deficiencia.
Si se pica es que algo hay.. a saber cuantas p***** se habrá comido esta perla de «persona». Ya cansan con su supuesta moralidad correcta, yo no veo lógica su moralidad, a mi todavía no se me a presentado un hombre acompañado de ángeles bajo un haz de luz a decirme que él cree en mi y que siga su palabra, cuando ocurra ya me lo replantearé.. Igual que respeto que haya gente católica, pido que esa misma gente que me odia por algo tan normal y personal como mi sexualidad, me respete igual que yo a ellos, que quieren comprarse rosarios y ir a misa cada domingo, me parece perfecto, ni pincho ni corto, al igual que ellos ni pinchan ni cortan en mi forma de vivir mi sexualidad, me enamoro de personas no cuerpos, y si me enamoro de un hombre siendo yo uno, pues perfecto, como me dice mi madre: Ya te darás la hostia tu solo, no necesitas a nadie que te la de por ti. (con esto quiero decír que nadie debe venir a decirme que es lo moralmente correcto en temas de amor, sobretodo cuando se le supone que ese alguien como el de la foto no a practicado jamás el sexo o no tiene ni puta idea de lo que es vivir con otro ser humano al que amas en un mismo hogar)..
Me da mucha pena ver, cómo mal interpretan la postura católica en relación a la homosexualidad, quién te ha dicho que se les odia? si hay gente que aún los maltrata y desprecia, créeme que no han de ser católicos sinceros, porque el mensaje de Jesús, es de amor no de odio, Jesús nos ama a todos por igual, y eso es lo que la iglesia nos inculca, si te sientes atacado por algunas personas que dicen ser católicas, lo lamento de verdad, pero no juzgues a toda la iglesia por algunos malos practicantes.