En las últimas semanas estamos hablando demasiado de Rusia. La espiral de homofobia en la que se ha sumido este país desde que se aprobara la ley contra la propaganda homosexual parece que no tiene fin, y cada pocos días, por no decir horas, surge alguna noticia que nos hace volver los focos hacia este país.
Esta semana, Putin, auténtico responsable de la homofobia que se vive en Rusia (no olvidemos que allí no se mueve nada sin que lo apruebe este nuevo zar), nos ha sorprendido con unas cínicas palabras. En un hipócrita intento de mostrar normalidad hacia la homosexualidad, Putin ha asegurado que «Tchaikovsky era gay y todos amamos su música».
Días después de que una película financiada con dinero público negara la homosexualidad de Tchaikovsky, el todopoderoso presidente ruso salta a la palestra para afirmar durante una entrevista en un programa de la televisión Channel 1 que a Tchaikovsky lo siguen queriendo pese a su homosexualidad.
Con estas palabras, y poniendo a Tchaikovsky como ejemplo, Putin quería demostrar que su país no discrimina a los homosexuales, obviando las leyes homófobas, las multas a los turistas que se atrevan a defender los derechos LGBT o las amenazas a los deportistas que muestren su simpatía hacia los gays.
En este sentido, el nuevo zar de Rusia ha asegurado que nada terrible está pasando en su país, olvidándose también que en Rusia se persigue, acosa e incluso se asesina a los ciudadanos LGBT. No sé a quién pretenderá engañar Putin con estas palabras llenas de hipocresía. A nosotros, desde luego, no nos engaña con este canto de sirenas, y aquí seguiremos para recordar con nuestros posts la terible situación que están viviendo los gays en Rusia. Y recordemos que Rusia no está tan lejos de nuestras fronteras…
Vía I Europa Press
En Ambiente G I En el colmo del cinismo, los rusos dicen que Tchaikovsky no era homosexual
eee wtf?
Vaya, vaya. ¡Qué poco a tardado Putin en hacerse caquita! Como sabe que la nueva reunión de G20 no sólo versará sobre la crisis siria, sino también sobre temas tan controvertidos como la situación de la homosexualidad rusa (tema que SÓLO expondrán Cameron y Obama en privado), prefiere retractarse y recular ahora que «sabe» que está a tiempo. De verdad, este tipo es aborrecible y asqueroso, después de promover la homofobia en Rusia (una homofobia que siempre ha permanecido latente en el seno del pueblo ruso, pero nunca ha salido a la luz con tanta fuerza) y de acrecentar el odio al colectivo llegando a límites inimaginables, ahora pretende dar una visión abierta y liberal de una Rusia que está amordazada y desnutrida.
¿tan tontos cree al resto del mundo?…
Cambiando un poco de ejemplo suena igual que decir: «Mussorgsky era alcohólico, pero todos amamos su música, a pesar de su alcoholismo».
Es decir, sólo aman la música de Tchaikovsky, y eso, porque es tan buena música que hace olvidar el pecado de su autor.
Al considerar a uno grupo o colectivo ciudadano de segundo, si quiere ser «respetado» (esto es dejarle vivir sin que pida) debe hacer algo productivo a la sociedad. Es decir la sociedad se convierte como una especie de parásito que se aprovecha,