Vanesa de las Heras y Susana Meseguer, cónyuges desde noviembre de 2005, decidieron juntas que Susana tuviera una hija por inseminación artificial, para que al nacer Candela – la hija de ambas -, Vanesa pudiera adoptarla. Este trámite es perfectamente legal en España, ya que desde el 30 de Junio de 2005 los matrimonios gays tienen el mismo derecho a adoptar que los heterosexuales. Por lo general es un proceso supuestamente sencillo.
Sin embargo, el titular del juzgado de primera instancia número 9 de Murcia, Fernando Ferrin Calamita, no les está poniendo las cosas fáciles al ejercer continuas resistencias a la solicitud que Vanesa presentó.
La pareja se sometió a un estudio psicológico, que obtuvo como resultado un informe favorable por parte de una psicóloga del Gobierno murciano, por lo que a primeras no existe motivo para denegar la solicitud pues se cumplían los requisitos rigurosamente. Aún así, el juez, se niega a ceder y lanza unas preguntas a los psicólogos de la Dirección General de Familia: ¿la niña no tiene derecho a una familia «normal»? ¿existe una alta la probabilidad de que la niña se vuelva lesbiana?.
Sigo sin entender como un juez que en teoría debe cumplir la ley vigente, no es detenido o multado por no ejercerla y más aún cuando no es la primera vez que lo hace. La ley ya está aprobada y su trabajo consiste en aplicarla. Entiendo su postura homófoba – es condenadamente religioso -, pero también entiendo que si no quiere aplicarla, puede dimitir de su cargo, ya que jamás debe olvidar que es un trabajador del estado y que por tanto trabaja para los ciudadanos, le gustemos o no. En fin, no se puede esperar otra cosa de un personaje que se come la Biblia con papas, lee aJose María Escrivá de Balaguer y encarceló a dos chicas en 1987 por hacer top-less.
¡Menudo perturbado!. Vive y deja vivir. ¿Eso no lo dijo Dios? ¡Debió decirlo!. Nadie es perfecto.
Vía | El País (30/06/07) | El País (01/07/07)
Una cosa es su trabajo y otra su vida privada. Tendrá que aplicar la justicia sin tener en cuenta sus motivaciones personales y si asi lo hace deberia estar castigado.
Es como si un vendedor de coches no vende coches porque los considera peligrosos, pues que cambie de trabajo.
veo que has entendido perfectamente lo que decía… es muy libre de dejar el puesto y opositar a otra cosa, meterse a cura, hacerse numerario del OPUS DEI o pegarse un tiro, tal y como Arturo Pérez-Reverte afirmaba en el artículo de la semana pasada de El Semanal
Esta gente que siempre está con la Constitución y las leyes en la boca, se las pasan por el mísmisimo forro cuando les conviene.
¡Viva la hipocresía!