Voy a tratar de resumir la historia porque es complicada. Ashley Cole es un jugador de fútbol inglés que hasta el año pasado jugó en el Arsenal londinense. Esta temporada cambió de club pero no de ciudad y se fue al máximo rival, el Chelsea. Allá por el mes de febrero pasado un par de diarios sensacionalistas (The Sun y News of the world) publicaron sendos artículos acerca de una supuesta orgía gay en la que, aseguraban, tomó parte Cole. Los dos diarios pidieron públicamente disculpas meses después por esta «información».
Resulta que el pasado fin de semana se enfrentaban Arsenal y Chelsea y desde una web de hinchas del Arsenal se animaba a sus seguidores a imprimir unos falsos billetes de 20 libras con la imagen de Ashley Cole como reina de Inglaterra, con diadema y todo, que debían ser arrojados al jugador cada vez que tocara la pelota. Además se pretendía que todos fueran con unos teléfonos móviles de plástico en alusión a una supuesta práctica sexual que Cole habría puesto en práctica (valga la redundancia) en la famosa orgía fantasma.
Hasta aquí la historia. El caso es que este tipo de mofas y ridiculizaciones alusivas a la sexualidad no son de recibo. Nos quejamos y todos nos levantamos cuando se arrojan plátanos a un jugador negro o se lanzan insultos racistas, pero cuando se denigra la homosexualidad nadie mueve un dedo… Bueno, nadie no: Peter Tatchell, activista queer británico, líder del grupo OutRage! pidió a los clubes implicados declaraciones públicas que desautorizaran estos insultos. Los clubes le restaron importancia.
Pero Tatchell se reunió con la Policía y llegó al acuerdo de que la policía repartiría flyers anti-homofobia a la entrada, confiscaría los materiales homófobos que llevaran y grabaría en vídeo a los hinchas homófobos de cara a poder denunciarlos.
Buen ejemplo, que debería cundir.
(He elegido una foto de Ashley Cole, porque me pone; es el de la derecha; el otro es DJ Masterstepz, amigo suyo también implicado en la historia)
Vía | Têtu | Têtu | OutRage! | Pink News
Un poco de offtopic: «supuesta práctica sexual que Cole habría puesto en práctica». Eso no es una redundancia, en tanto una «práctica» se puede llevar a cabo o no. Ejemplos de verdadera redundancia/pleonasmo: nieve blanca, subir hacia arriba, ciego que no ve…
Esa coletilla del «valga la…» es una mala costumbre muy extendida, porque el 99% de las veces no existe tal redundancia; vamos, yo nunca la he visto bien usada. Casi siempre estaremos ante una falta de vocabulario, imperdonable cuando se escribe un escribe (no tanto cuando se habla) si tenemos en cuenta lo fácil que es manejar diccionarios en internet.
De sinónimos, antónimos etc: diccionarios.elmundo.es