El culo es una de las partes más tiernas del cuerpo de nuestra pareja. A poco que se cuide un poco, es bonito, es sexy, es dulce, tiene un punto de misterio y es la puerta de entrada de un universo único, que explorado convenientemente, es una fuente infinita de comunicación sin palabras. Puede ser protagonista activo de las fantasías de ambos, o testigo mudo del reposo mullido de uno entre el otro, cuando no apetece más que compartir somnolencia con quien estás amando. Es extremo del puente colgante de la espalda de tu amado y resulta enormemente relajante acariciarlo o que lo acaricien con suavidad bajo ninguna excusa.
Asomarse a él, plantarle cara, dorarlo a besos mojados, lamerlo, explorar con los dedos, la lengua, los labios, los pliegues de su delicada boca de color púrpura, o pasearse desde ella hasta la base de su saco moreno de testículos es sencillamente delicioso.
Explorando en Internet, he descubierto que además de todo eso, habla, y no lo digo en el sentido escatológico de la palabra sino en el paralelo a la Quiromancia, porque resulta que existe una forma de lectura del presente y el futuro similar a la lectura de la mano aplicada al culo. Se llama Rumpología. Pasad, pasad, que os cuento. [Leer más…] acerca de¿Te leo el culito?