Desde AmbienteG queremos sumarnos al aplauso eufórico que la prensa escrita y digital, no sólo española, le está rindiendo estos días a Rafael Nadal. El manacorí de Oro, el Mowgli balear, el asombroso deportista y mejor persona, merece nuestras líneas por su nobleza, por su coraje, y ya, venga, cómo no, por su legendarios bíceps y endiabladamente apetitoso culo.
Hetero a nuestro pesar, felizmente liado con esa Xisca discreta y que por amor, ha sabido dar prioridad a la carrera de su amado, a la que detestaríamos de envidia si no fuese porque no podemos imaginarla menos centrada y entregada que su chico, Rafa es sin embargo icono gay, y no le hará ascos a aparecer por aquí, correspondiendo al hecho de que nosotros no le vamos a reprochar haber nacido en la acera de enfrente, de enfrente a la nuestra, quiero decir.
En algún lugar leí que Nadal tenía cara de mono inflado de esteroides. No voy a decir que ese comentario sea fruto de la envidia cochina, aunque quizás sí. Lo de los esteroides, sin embargo, sí que va a ser por eso, porque cualquiera que se cuide a base de ejercicio sin meterse caca en el músculo, sabe que ese cuerpo está hecho a base de curro honesto. Lo de mono, se lo restrego por la cara a quien lo soltó. No soy el único que pienso que este niño es jodidamente sexy. [Leer más…] acerca deRafael Nadal, la cabeza y el culo