En estas páginas he defendido el uso de la etiqueta gayfriendly para los locales comerciales, sobre todo cuando se trata de hoteles porque así evitas los problemas inesperados que puedan surgir de algo tan simple como pedir una cama de matrimonio. Personalmente he tenido problemas tanto en bares como en hoteles por lo que, en las ocasiones que lo creo conveniente, escojo un local claramente gayfriendly.
El problema llega cuando la etiqueta gayfrendly va de la mano con otras muchas etiquetas que están ahí sólo para atraer clientes y el trato final no es el esperado. Las causas pueden ser muchas: desde un empleado sin la sensibilidad necesaria hasta la unión de las etiquetas gayfriendly y familiar en un mismo establecimiento –no digo que sean incompatibles- provocando tensiones poco deseables entre clientes.
Esto ha conseguido que muchos de nosotros desconfiemos de la etiqueta gayfriendly incluso cuando no deberíamos y que empecemos a darle más relevancia al gay owned –propietario gay-, simplemente para asegurarnos de que el trato será el esperado, es decir, el normal. [Leer más…] acerca deEl abuso de lo gayfriendly