La película de la que quiero hablaros no narra una historia explicitamente homosexual, y para la mayoría ni siquiera lo será implicitamente; pero la historia forma parte de mi educación sentimental y como obra, sutil y compleja, propone diversas líneas de reflexión, como capas de una cebolla, que cada espectador toma y hace suyas.
Adiós muchachos (Au Revoir, Les Enfants – 1987), dirigida, escrita y producida por Louis Malle, multipremiada y elogiada por la crítica, narra una historia triste, casi arquetípica, de buenos y malos, de inocencias interrumpidas y descubrimientos ingratos. Una historia donde los héroes y los villanos adolecen de la mediocridad propia de la realidad. No hay superhombres, solo seres humanos más o menos equivocados.
Malle, heteruzo de pro, que se pasó por la piedra a las mejores hembras de su época, confesó que la historia era autobiográfica. Lo que sin duda eliminaría cualquier duda sobre la orientación sexual de la pareja protagonista; pero el cine, como la literatura, no es del que lo escribe o filma, sino del que lo disfruta. [Leer más…] acerca deAdios Muchachos