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Mike Wallent es un ejecutivo de Microsoft que se hizo relativamente famoso cuando anunció que iba a someterse a una reasignación de sexo, por lo que ahora es conocida como Megan Wallent.

Algo que siempre me ha ‘alucinado’ es la percepción que tiene la gente de que todos los transexuales son heterosexuales –es decir, que sus intereses amorosos radican en el sexo opuesto al que han asumido-. Nada más lejano de la realidad, si algo abunda en la comunidad transexual es la alta incidencia de homosexuales.

Megan es un buen ejemplo de esto: “Nunca me han atraído los hombres, nunca, ni uno. Durante mi transición, una de las preguntas que me hizo –mi mujer- fue: ¿de repente te van a empezar a gustar los hombres? ¿Será este un problema? A lo que yo le respondí ‘No, no me puedo imaginar algo así’”.

Evidentemente Megan es una chica lesbiana, como hay miles, que tiene la suerte de tener una fantástica esposa.

Vía | Queerty