Conforme avanza la temporada de American Horror Story Hotel, seguimos indagando en el pasado de La Condesa y es en este episodio en el que por fin desenmarañamos su trama completamente: ya sabemos su origen, quien era su verdadero gran amor y porqué se hospeda en el Hotel Cortez de forma indefinida. Por cierto, interpretación de Lady Gaga bastante convincente. Si sois amantes del gore, con este episodio no os podréis quejar, el ama de llaves también está contenta ante tamaña muestra sanguínea. Además, continuamos el descenso a los infiernos del declive John Lowe, que se encuentra completamente desatado. Contiene spoilers.
El episodio casi al completo es un flashback constante que se inicia con unos albañiles que andan abriendo pasadizos ocultos del hotel bajo encargo de Will Drake. Pero la presencia de los albañiles es fugaz, a diferencia de la vida real en la que su estancia se torna eterna, ya que son devorados cual bocata de chistorra en el recreo de cualquier colegio. Algo tan brutal no puede ser obra de nuestros asesinos habituales. Algo ha salido de los pasadizos. Algo que lleva mucho tiempo confinado y tiene hambre.
Adentrándonos en el flashback, nuestra adorada Gaga era una humilde actriz de reparto de principios de siglo XX con un gran amor – y no sólo el suyo, también el de mi abuela y toda su generación – el gran latín lover por excelencia, Rodolfo Valentino. Pero a diferencia de mi abuela, la Condesa si llega a catarlo, manteniendo una relación de esas abiertas con él y su mujer que tanto parece disfrutar la Condesa. Si, la condesa es poliamorosa. Pero un día Rodolfo muere misteriosamente, dejándola con el corazón roto en mil pedazos y sin razones para vivir. Así que decide echarse por la ventana del nuevo y flamante Hotel Cortez. Pero hay un educado caballero que lo evita, a lo Jack Dawson en Titanic pero mucho más señorial. Hablamos del dueño, J.P. March, que ve en ella una persona singular, así que decide desposarla. La Condesa es toda una caja de sorpresas y no sólo no le desagradan los hábitos y costumbres de James, sino que incluso le ayuda a pulirlos. He de decir que a pesar de ser un exquisito y sanguinario asesino, James es bastante buen marido. Es tan buen marido que el día que descubre que su mujer está enamorada de Valentino y planea huir con él, decide enclaustrarlo entre cuatro paredes para la posteridad. ¿Pero no estaba Rodolfo Valentino muerto? Pues no, ya sabéis que en American Horror Story todo es como en Los Otros, y los que parecen muertos están vivos y a los vivos les queda poco. Rodolfo ha sido convertido en vampiro por el director de Drácula para que su talento perdure eternamente. Así que sí, La Condesa es la consorte eterna de J.P. March, pero un poco a su manera, ya que ese matrimonio no es óbice para que se case con otros, que ella es muy de poliamor.
En otro orden de cosas el desquiciado John está en un psiquiátrico, pero no, no es que haya decidido recluirse porque lo necesite: las alucinaciones, el alcoholismo, disparar delante de su hija, y el resto de atrocidades que padece no parecen ser suficientes para lograrlo. John está en una misión secreta, y es que a pesar de estar de baja indefinida, como en las pelis de acción de los 80, el detective Lowe se ha colado en la comisaría y tiene información sobre cómo encontrar al asesino de los 10 mandamientos. Hay un testigo de los asesinatos, una cómplice recluida en el centro de salud mental que puede ayudarle a revelar su identidad. Pero ya sabéis que John Lowe es un poco Antonio Resines y nada sale como planea.
En Ambiente G | American Horror Story Hotel s05e06 – Room 33
Pues para mi que el asesino de los 10 mandamientos es el policía inepto. Y luego tienes a los niños vampiros, que no se ha mostrado nada de ellos en dos capítulos.