A Different Light es otro gran referente en Castro, y un lugar de obligada escala para el lector. Situada prácticamente en la neurálgica esquina con la 18th, la librería, que tiene una hermana gemela en West Hollywood (la ciudad gay del Condado de Los Angeles), ofrece desde hace 30 años la mejor selección de publicaciones especializadas en literatura e intereses para la Comunidad GLBT.
Regularmente, A Different Light invita a autores a presentar sus libros y firmar ejemplares para aquellos que se quieran acercar a conocer in situ al invitado de turno, por pura curiosidad morbosa (como ocurrió recientemente con Lehmkuhl Reichen), o por verdadera atracción literaria. Yo hace unos días me dí una vuelta por la tienda, sin saber entonces que justo esa tarde Ben Patrick Johnson presentaba su última novela, «One Size Fits All.»
Llegué 15 minutos antes de la presentación, con el tiempo justo para irme antes de que esta empezase, pero el suficiente como para estrechar la mano del autor y charlar con él por unos minutos. Al volver a casa, buscando su bibliografía en Internet, me encontré con un personaje que por más de un motivo merece un post en este blog.
¿Sabéis lo que es un «voice-over«? Bueno, es algo así como un narrador, aquel que pone voz de fondo en los documentales o los trailers de películas que vemos en los cines. Ben Patrick Johnson es voice-over. Uno de los más cotizados de Hollywood. Su voz grave se puede escuchar en los trailers originales de películas como «Lilo y Stitch», «Las Mujeres de Stepford», «Embrujada», «Yo, robot», «El pianista», «X-Men» o «Noche en el Museo» entre otras. Además, Johnson es modelo, novelista («Third and Heaven» y «In and Out in Hollywood» precedieron a la arriba citada «One Size Fits All») y por si hacía falta mencionarlo, gay. Claro que esto último no es mérito de él. Le venía puesto.
Pero del mismo modo que su sexualidad vino tal cual, porque con esas cartas nacemos y con ellas nos toca jugar, Ben nació con una voz que con el tiempo acabó siendo portentosa y un físico que le ha servido para ser portada de numerosas publicaciones. Cosas dadas, cosas con las que se nacen. Es responsabilidad de cada uno comprometerse con cada una de ellas. No todos lo hacemos. Ben Patrick Johnson optó por el compromiso.
«Somos jodidamente apáticos como grupo. Tenemos que despertarnos como comunidad.»
Estas son palabras suyas. Palabras de alguien que es consciente que a un tiempo que debe hacer y hace este tipo de autocrítica, sin embargo se considera también culpable por enfocarse tantísimo en su cuerpo, por rendir culto a la mística del gimnasio, por estar al tanto de cual es la próxima parada en el circuito de fiestas gay.
Sin embargo, y siendo consecuente con ese lado autocrítico, Ben ha querido dar ejemplo rompiendo esa apatía, dedicando gran parte de su tiempo e intereses a dos proyectos con más de un punto de conexión:
«BPJ, Life on the Left Coast» es un programa que Ben graba y emite desde su propia casa de lunes a viernes, a las 9 de mañana, hora de California. Dos veces menos en verano. Durante el programa, Ben, inspirándose en las noticias del día que consulta previamente en diarios digitales como el New York Times, Washington Post, Los Angeles Times, las páginas web de BBC y Al Jazeera, recoge y expone voces críticas hacia la presidencia de su país y ante los grupos antigay entre otras cosas.
Su otra iniciativa es «The Ben Patrick Johnson Foundation«, enfocada, en palabras de su fundador, a:
«Hacer de este Mundo un lugar más tolerante como resultado de nuestras actividades. A través del apoyo de organizaciones sin ánimo de lucro con intereses similares a los nuestros. La Fundación busca sostener y promover derechos humanos y libertades civiles para todos, incluyendo las comunidades lesbiana, gay, bisexual y transexual, gente con SIDA y VIH y aquellos cuyas voces a menudo no son tenidas en cuenta, como el anciano, el económicamente desfavorecido y aquellos con creencias religiosas no definidas. La Fundación Ben Patrick Johnson no tiene ninguna aficiliación política predeterminada, sino que apoya a grupos de derechos humanos y candidatos de cualquier partido que patrocine y apruebe leyes a favor de los derechos humanos, libertades civiles y el discurso libre.»
No es mal plan, ni poco compromiso por cumplir. A los 38 anos, Ben Patrick Johnson podría vivir despreocupadamente de las rentas de su voz y su físico… Bien por él.
Si sus únicos fallos son divertirse e ir al gimnasio, no hace falta que sigas, vale me lo quedo ;). Ya, ya se que es gay.
Es bueno que haya gente asi, con buenas intenciones desde por la mañana. Ojala fuera algo contagioso.
Wow, impresionante currículo. Gracias por presentarnos gente así, Dan.
Aunque hay gente que no sé de donde saca el tiempo para hacer todo lo que hace la verdad.
Supongo que si te lo planteas bien, algo de tiempo puedes dedicarle, otra cosa es que tambien sea cosa de dinero. Esto es más complicado.
Estoy con Sonia, si lo único malo que tiene es lo de ser curasán…
Bueno, yo me quedaria tambien con el de plano!, aunque habria que ver como es el chaval en la convivencia… Por lo pronto me vale su compromiso muchisimo. Parece que si es posible dedicarle mimitos al cuerpo, ganarse el pan y de paso echar un cable!! La manera?… ummmm, eso ya depende de cada cual.
Lo dicho, bien por ti, Ben