¡Cuidado Spoilers!
El capítulo de esta semana de The L Word es uno de los más divertidos que recuerdo. Las carcajadas de Bette son memorables y se van repitiendo por todo el capítulo, aunque las demás chicas también se pegan unas risas.
Seguimos sin demasiadas escenas de sexo – bueno, en realidad sí las hay pero siempre son elípticas -, nada que se parezca a las ‘calientes’ escenas de Shane y Carmen.
Como curiosidad cabe apuntar que en este capítulo aparece Angela Robinson – a la derecha -, coproductora ejecutiva, directora del capítulo y una de las directoras lesbianas más interesantes –los mejores capítulos de The L Word son suyos-.
Esta semana la que quiere matar a Jenny es Tina –por cierto, el traje negro que lleva en esta escena inicial le queda de muerte-. El ejecutivo del estudio la llama porque han desaparecido los negativos de la película y la acusa a ella de haberlos robado, ella acusa a Jenny y Jenny acusa a Adele… y finalmente las culpas vuelven a recaer en Tina porque aparece su firma en un documento que la incrimina.
Amanecemos en la cama con Shane y Jenny –polvo elíptico en el que se puede apreciar el torso desnudo de Shane y sus múltiples tatuajes-; acaban de empezar a tontear en la cama cuando aparece Alice para hablar de su tratamiento –una especie de preguión-.
Alice se da cuenta que pasa algo y espía a Shane y Jenny, así que descubre que están liadas –la cara que pone de alucinación/asco es brutal-. Como buena cotilla lo primero que hace es enviarle un SMS a todas sus amigas informándoles de la nueva pareja. Aquí nos encontramos con una de las secuencias más divertidas de toda la serie –en el vídeo, lo divertido empieza en el 1:30-. Por cierto, eso de que Kit no sepa mirar los SMS no es demasiado creíble, hasta mi madre sabe…
Bette, en un movimiento poco inteligente, le pide a Jodi que dimita; esta, muy enfadada, se lo cuenta a Phyllis, quien despedirá a Bette para evitar una demanda de acoso sexual –cada vez odio más a Jodi-.
Pero después de despedir a Bette, ¡Phyllis se le declara! –y pone un acento sureño super sexy-, Bette vuelve a partirse de risa y en un momento muy cómico se le tira encima para besarla, Bette se aparta y Phyllis cae –magnifico momento de comedia clásica-.
Alice –con una camisa rosa de cuello estilo monja de los 80- la lía en su programa de televisión: en vez de cotillear, lee una carta en la que hablan de un chico al que asesinaron por gay. Esto la pone al borde del despido, pero en el centro gay de Los Angeles le piden ayuda para evitar que una chica, que es fan suya, se suicide.
Mientras pasa todo esto, Helena recibe flores de Dylan, insinúan que Kit se liará con la Drag que contrata para la disco, y Shane nos informa de lo impresionante que es el sexo con Jenny.
Al final las chicas están en The Hit –la disco de Kit y Helena- hablando del cotilleo del día, cuando aparecen Shane y Jenny disimulando; Bette no puede evitar partirse de risa –serán las excusas que ponen para estar a solas- y finalmente Shane y Jenny deciden que no se van a esconder más.
En resumen: despidos –Bette seguro y Alice y Tina están al caer-, muchas risas y la extraña pareja.
A continuación, como siempre, los avances del siguiente capitulo.
Se echaba de menos esos pequeños gags protagonizados por Alice y las demás… ^^
Lo de Kit que no sabe leer el mensaje, hubiera estado más gracioso si le hubiera pedido a la otra que se lo leyera jeje