Hace unos años reflexionábamos sobre esas mujeres que en la madurez deciden pasar de la heterosexualidad al lesbianismo, tras un proceso que suele sorprender a su entorno.
Ahora, científicos de la Connecticut State University y de la Utah University han publicado una investigación para la que han estado estudiando la sexualidad de las mujeres con el paso del tiempo y se han dado cuenta que esta es más flexible de lo que esperaban.
La profesora de estudios de género Lisa Diamond de la Utah University siguió la evolución de la sexualidad de más de 100 mujeres con algún grado de atracción lésbica durante 10 años y durante ese mismo tiempo dos tercios cambiaron su inclinación sexual: algunas bisexuales pasaron a definirse como lesbianas, mientras que hubo lesbianas que pasaron a ser heterosexuales –un fenómeno conocido en el ambiente como: LUG o Lesbian Until Graduation -.
Por su parte, la profesora Christan Moran de la Connecticut State University ha estudiado la reacción de las mujeres previamente heterosexuales que descubren que tienen sentimientos lésbicos. Para estas mujeres es especialmente difícil aceptar su sexualidad y salir del armario, sobre todo las que han tenido hijos.
Christan Moran rechaza la posibilidad de que se trate de lesbianas que han vivido reprimidas hasta la madurez, sino que achaca este cambio a la fluidez de la sexualidad femenina.
Entre las lesbianas famosas encontramos varios casos de mujeres que anteriormente han disfrutado de vidas completas como heterosexuales para luego pasar a gozar de relaciones lésbicas como: Cynthia Nixon, Alison Goldfrapp o Meredith Baxter.
Vía | Telegraph
En Ambiente G | La soledad de la mujer madura
En mi humilde opinión la orientación sexual no se cambia, para mí se descubre. Y pienso que eso de alternar entre hombre y mujer corresponde a personas bisexuales, de las que nos olvidamos muy a menudo. Sí creo que hay diversos factores que influyen en el deseo hacia uno u otro sexo, pero repito influir no cambiar.
Yo creo que son lesbianas pero que no lo han podido aceptar y resultaba más fácil casarse y tener hijos que aceptar su propia identidad. De hecho yo salí con una mujer así , con 45 años después de que su matrimonio se rmpió acabamos encontrandonos y se dió cuenta de que eso había querido siempre, y hablando con ella dijo que las mujeres desde siempre eso le había atraido pero que nunca se le pasó por la cabeza en ese tiempo ser ella misma.Ahora después de 10 años se lo ha dicho a las hijas pero vá todavía poco a poco , se ha echado novia pero vá con mucho tiento, vive en centroamerica y tiene una posición social de madre amantisima, pero ella intenta cambiar.Tb hay que tener encuenta que se pueden enamorar de una sola persona y hasta que esa no aparece pueden no ser ni lesbianas ni hetero, ya digo….hasta que aparece la persona adecuada.
Creo que el estudio tendría que tener más sujetos para aumentar su validez y fiabilidad, a partir de un «n» de 100 no se pueden sacar muchos resultados concluyentes.
Aún así, me parece curiosa la supuesta fluctuación sexual femenina
Bueno, yo creo que el comportamiento humano no siempre puede reducirse a estudios… hay muchos factores que influyen y que inevitablemente no pueden tenerse en cuenta.
En cualquier caso, y siendo abierta de mente, y si fuera cierto el estudio ¿qué?
Vivimos una vez y hay muchas cosas en el mundo, es inabarcable. La experiencia sexual es una de nuestras vivencias más importantes y humanas. La identidad, lo que somos como personas, es lo que hace interesante todo lo que hacemos (sexual o no) y no debemos renunciar a conocernos mejor. En mi caso nunca habría descubierto mi lesbianismo de otro modo. Lo que me parece irrenunciable es no tener miedo a mirarse al espejo…
Si os interesa el tema os recomiendo un estupendo libro sobre la homosexualidad femenina titulado «Desorientación sexual. Género, sexo, deseo y automodelación». Su autora Tamsin Wilton, en España editado por McGraw-Hill Interamericana.
Si la sexualidad fluye: BE WATER MY FRIEND… ;D